Si bien es cierto, si tienes cierto tiempo con un dolor de rodillas, te cuesta caminar, y pasas mucho tiempo en cama debido al dolor. Sin embargo, hoy quiero enseñarte el mejor tratamiento natural para combatir estos terribles dolores y que puedas volver a caminar y a desempeñarte en tu vida diaria normalmente.
La realidad es que este remedio se trata de un batido que puedes utilizar tanto como bebida y como ungüento. Lo mejor de esto es que puedes realizarlo tu mismo desde la comodidad de tu hogar, con ingredientes que seguramente tienes en tu nevera.
De modo que si quieres acabar con estos terribles dolores, lee hasta el final y aprende a prepararlo. ¿Quieres Saber Más? Sigue Leyendo… Recuerda Compartir Esto Con Tus Amigos.
Sin lugar a dudas, los dolores en las articulaciones todavía es un desafío con el que la medicina tradicional aún no ha podido darle una respuesta concreta y efectiva. Hasta los momento solo existen tratamientos para aliviar las molestias articulares a través de medicamentos antiinflamatorios y que pueden producir ciertos efectos a nivel estomacal.
Los padecimientos como la artrosis o la artritis que provocan dolores articulares casi de forma permanente, son muy difíciles de tratar. Estas enfermedades van conduciendo a una inmovilidad segura y definitiva, por lo tanto estas personas se ven obligadas a utilizar bastones o permanecer acostados durante mucho tiempo.
Debido a lo referiddo, debemos mencionar que existe en la medicina natural un remedio ruso muy efectivo que te ayudará con ese dolor articular, además de que funciona para ralentizar el avance de la enfermedad. Por eso hoy te presentaremos como prepararlo.
REMEDIO PARA LOS DOLORES ARTICULARES:
Ingredientes:
- – 1 berenjena
- – 1 litro de agua
PREPARACIÓN:
En una olla hasta que hierva. Retira del fuego y coloca dentro del agua caliente la berenjena cortada en rodajas. Deja que el agua se enfríe y cuando tome temperatura ambiente cuela la preparación. Debes guardar 750 ml de esta mezcla por un lado y conserva el resto en otro envase.
PARA USO INTERNO:
Los 750 ml que apartaste antes, debes dividirlo en tres tomas a lo largo del día de la siguiente manera: una toma en ayunas, la segunda toma antes de almorzar y la última antes de dormir.
PARA USO EXTERNO:
Los 250 ml restantes debes agregarle 50 ml de aceite de oliva. Mezcla bien ambos ingredientes y aplica sobre las zonas doloridas frotando suavemente antes de ir a dormir. Es necesario mantener en calor las zonas afectadas, lo mejor es colocar un paño con una venda para mantenerlo sostenido.